Para ayudarle se me ocurrió agregar: “Argentina hace muchos años intentó ocupar California”. Debbie, sorprendida, levantó las cejas y no dijo nada.
Pero el bichito de la duda ya le había picado interiormente. Al día siguiente, apenas entró al aula me llamó para decirme confidencialmente:
“Roberto: Ayer me tomaste de sorpresa. Cuando volvi a casa consulté y me enteré de que un barco argentino en el siglo pasado tomó la capital de California. Yo no lo sabía”. Debbie no era californiana sino de Minnesota.
La historia ‘magister vitae”
Es muy posible que a otros tambien el título de estas líneas le parezca antojadizo. Quienes conocen nuestra historia saben que no lo es. Los historiadores americanos, y mas propiamente los californianos, reconocen que alguna vez, aunque por muy corto tiempo, la bandera argentina flameó soberana en California. España conquistó y colonizó la región, luego heredada por Mexico. Rusia ocupó por varios años Port Ross para desarrollar actividades pesqueras.
Hipólito Bouchard, marino de origen francés, nacido en Saint Tropez, pero nacionalizado argentino y con patente de corso otorgado por el gobierno de Buenos Aires, llegó a Monterey capital de Alta California el 22 de Noviembre de 1818 al mando de la fragata “Argentina” y la corbeta “Chacabuco”. En la tripulación figuraban el comandante de infantería José María Piris y Tomás Espora. Luego de cruenta lucha el día 24 de Noviembre Bouchard logró apoderarse de la fortaleza llamada Presidium capturando veinte piezas de artillería. Inmediatamente la bandera argentina fue enarbolada al tope del mástil del Presidium y Bouchard ordenó una solemne formación de doscientos hombres en la plaza de armas del Presidium para declarar la ocupación de California en nombre de las Provincias Unidas del Río de la Plata.
Días despues navegó hacia el sur en la fragata “Argentina” hasta Santa Bárbara. Tras un infructuoso intento de ocupación y posterior intercambio de prisioneros, Bouchard siguió bajando la costa y ocupó San Juam Capistrano (14 de Diciembre de 1818). Este fué el último lugar ocupado por los marinos criollos que ante la imposibilidad de recibir refuerzos desde Buenos Aires para enfrentar las crecientes fuerzas locales, por decisión de Bouchard, abandonaron California. Capistrano sin embargo siguió ligada a nuestro país por el simpático hecho de que hasta ahí llegan anualmente en primavera las golondrinas que emigran desde Argentina.
Santa Bárbara bendita
El mismo bichito de la curiosidad histórica que le picó a Debbie tal vez me saltó a mí porque desde entonces me propuse visitar Santa Bárbara en la primera oportunidad posible. Cuando lo pude hacer comprobé que Santa Bárbara tiene todas las bondades deseables: mar azul con playas doradas, arboladas sierras costeras, clima privilegiado. Santa Bárbara reune los requisitos imaginables como para ser la antesala del paraíso. Por algo los artistas de Hollywood y todos ”los ricos y famosos” la prefieren para levantar allí sus mansiones.
Viniendo desde Los Angeles por la escénica Highway 101 apenas llegados a Santa Bárbara fuimos hasta un largo muelle en la playa desde donde se tiene una vista panorámica de la zona. Mi sorpresa fué ver en el muelle altos mástiles con “banderas de países que alguna vez ocuparon California: España, Rusia, Mexico. Estados Unidos y Argentina”, según decía una inscripción aclaratoria.
Al día siguiente al visitar el County Court House (edificio historico judicial) pude comprobar que el mural mas llamativo del segundo piso de Theodore Van Cina (1929) representa la ocupación de Santa Bárbara por Bouchard y sus marinos criollos. La historia californiana denomina a 1818 “el año de los insurgentes”, pues así describían a los recientemente independizados sudamericanos. Dicen los cronistas que aunque Bouchard no pudo dar permanencia a su ocupación, dejó sembrado en la mente de los californianos el germen de la independencia. Algo similar a lo logrado por Belgrano con su expedición militar al Paraguay.
Los españoles de California en su intento de denigrar a Bouchard lo tildaban de “pirata”. “Pero los argentinos lo consideran un héroe. Todo depende del punto de vista de quien lo dice” opina el autor de un artículo sobre el histórico hecho publicado en el “Santa Bárbara Magazine” del Winter 98, página 65. Esa misma fuente incluye en las páginas 66 y 67 una copia del nombramiento de corso dado a Bouchard por el Director de las Provincias Unidas del Río de la Plata y una pintura de la fragata “Argentina” exhibida en Santa Barbara a préstamo del Museo Naval de Buenos Aires.
Roberto G. Eustaquio
San Diego, California
Meritum@hotmail.com
Santa Bárbara bendita
El mismo bichito de la curiosidad histórica que le picó a Debbie tal vez me saltó a mí porque desde entonces me propuse visitar Santa Bárbara en la primera oportunidad posible. Cuando lo pude hacer comprobé que Santa Bárbara tiene todas las bondades deseables: mar azul con playas doradas, arboladas sierras costeras, clima privilegiado. Santa Bárbara reune los requisitos imaginables como para ser la antesala del paraíso. Por algo los artistas de Hollywood y todos ”los ricos y famosos” la prefieren para levantar allí sus mansiones.
Viniendo desde Los Angeles por la escénica Highway 101 apenas llegados a Santa Bárbara fuimos hasta un largo muelle en la playa desde donde se tiene una vista panorámica de la zona. Mi sorpresa fué ver en el muelle altos mástiles con “banderas de países que alguna vez ocuparon California: España, Rusia, Mexico. Estados Unidos y Argentina”, según decía una inscripción aclaratoria.
Al día siguiente al visitar el County Court House (edificio historico judicial) pude comprobar que el mural mas llamativo del segundo piso de Theodore Van Cina (1929) representa la ocupación de Santa Bárbara por Bouchard y sus marinos criollos. La historia californiana denomina a 1818 “el año de los insurgentes”, pues así describían a los recientemente independizados sudamericanos. Dicen los cronistas que aunque Bouchard no pudo dar permanencia a su ocupación, dejó sembrado en la mente de los californianos el germen de la independencia. Algo similar a lo logrado por Belgrano con su expedición militar al Paraguay.
Los españoles de California en su intento de denigrar a Bouchard lo tildaban de “pirata”. “Pero los argentinos lo consideran un héroe. Todo depende del punto de vista de quien lo dice” opina el autor de un artículo sobre el histórico hecho publicado en el “Santa Bárbara Magazine” del Winter 98, página 65. Esa misma fuente incluye en las páginas 66 y 67 una copia del nombramiento de corso dado a Bouchard por el Director de las Provincias Unidas del Río de la Plata y una pintura de la fragata “Argentina” exhibida en Santa Barbara a préstamo del Museo Naval de Buenos Aires.
Roberto G. Eustaquio
San Diego, California
Meritum@hotmail.com
Muchas gracias por la información.
ResponderEliminarhttps://gacetafrontal.com/biografia-de-jorge-eslava/
ResponderEliminarLuego de esto, se pudo conocer que Jorge Eslava llegó a contar con muy importantes reconocimientos dentro del mundo de la literatura que, por supuesto, vinieron de la mano con lo que sería la labor que realizaba para los niños y adolescentes de su país.