La celebración del 12 de octubre como fiesta nacional fue dispuesta por el presidente Hipólito Yrigoyen por decreto del 4 de octubre de 1917, y recogida luego en varias leyes nacionales sobre feriados y días laborables. Conmemora el día en que el marinero Rodrigo de Triana, de la expedición de Cristóbal Colón, avistó tierra americana. El decreto de Yrigoyen señalaba que "el descubrimiento de América es el acontecimiento más trascendental que haya realizado la humanidad a través de los tiempos, pues todas las renovaciones posteriores derivan de este asombroso suceso, que a la par que amplió los límites de la tierra, abrió insospechados horizontes al espíritu".
El decreto del presidente radical se redactó en respuesta a un pedido de la Cancillería de España, que solicitó declarar un Día de la Hispanidad, para reforzar la coincidencia en la neutralidad en pleno conflicto de la Primera Guerra Mundial, y que contó con el auspicio de entidades culturales y científicas, como la Asociación Patriótica Española.
No obstante el nombre dado a este acontecimiento y los debates que se generaron en torno a el, es pertinente mencionar y recordar la reivindicación y la lucha por la igualdad de derechos de los pueblos originarios de nuestro continente americano.
La diversidad etnica, cultural, es lo que conforma la idioscincracia de una sociedad, sobre todo como la nuestra, que nació de esa heterogeneidad.
Los primeros dueños de las tierras, los que disponían de su propio sistema económico, de su lengua, de sus modos de organización social. Aquellos que hicieron y hacen de su cultura y sus tradiciones una ardua tarea de permanencia en la memoria de los pueblos. En este sentido, un reconocimiento y homenaje a nuestros primeros habitantes de estas tierras americanas.
Una sociedad no debe olvidar nunca su escencia; una sociedad debe crecer para todos, con respeto, igualdad y justicia.
Adrián E. Minc
Guía de Turismo
Socio AGUITBA Nº 391
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