¡Disfruta el nuevo artículo de nuestro día a día en el polo!
A
veces, es bueno darle una golosina a un caballo para mostrarle que está
haciendo un buen trabajo cuando estamos entrenándolo, o solo para mostrarle
cuanto lo amamos.
Hay muchas opciones de golosinas seguras para un caballo., como zanahorias, manzanas, cubos de azúcar o de alfalfa, pastillas de menta. Todo depende del caballo, ya que tienen diferentes gustos.
Es muy importante no
darles demasiadas de estas golosinas, y dárselas en pequeños trozos si les
damos, por ejemplo, zanahorias o manzanas, para evitar que se atraganten.
Es
necesario tener en cuenta que las golosinas son para ocasiones especiales, ya
que no queremos malcriar al caballo.
También hay muchas opciones que no son consideradas buenas golosinas, como papas o tomates, ya que pueden causar problemas digestivos al animal. Si el caballo es utilizado en competencias como partidos de polo, es muy importante no darles chocolate, ya que puede dar positivo en test de drogas. Sin embargo, si lo haces de la manera correcta, darle una golosina a tu caballo siempre será una buena experiencia y creara una conexión entre el caballo y tú.
Fuente: Argentina Polo Day
EL VETERINARIO DEL POLO Nos gustaría darle la bienvenida a nuestra edición de LIVING POLO y compartir con ustedes nuestro día a día en el polo. ¡Gracias!
Para
obtener el mejor desempeño en el campo de juego, el caballo de polo debe
estar saludable. El papel del veterinario es clave a la hora de mantener el
caballo en condiciones.
El
veterinario trabaja junto a los peones de cuadrilla- o petiseros, como se los
conoce en Argentina— para asegurase de que todos los caballo en un establo de
polo están saludables.
|
Está a cargo de supervisar
la dieta del caballo y su condición física, revisando la temperatura del
caballo, prescribiendo medicamentos si el caballo está enfermo y administrando
vacunas para prevenir enfermedades.
Antes de cada juego, los
veterinarios, con el asistente de cuadrilla, revisara la condición general del
animal, prestando especial atención a su estado físico (patas, músculos,
cascos) para asegurarse de que el caballo está preparado para la dureza del
partido. Los jinetes confían esta tarea en el veterinario sabiendo que dependen
de las condiciones del animal para hacer la diferencia en la cancha. Por este
motivo, su trabajo es crucial, ya que se encarga de uno de los elementos más
importantes del deporte: el caballo.